viernes, 14 de noviembre de 2014
QUINTANILLA DE TRES BARRIOS - El acuerdo de la Junta de Castilla y León declara la Atalaya de Quintanilla, en Quintanilla de Tres Barrios, San Esteban de Gormaz (Soria), Bien de Interés Cultural con categoría de Monumento.
Durante el siglo X, el impulso repoblador de los condes castellanos hacia el sur, ocupado por los musulmanes, supuso el establecimiento de una nueva frontera en torno al Duero.
La respuesta del Califato será el reforzamiento de los sistemas defensivos mediante la construcción de fortificaciones, adecuándolas a la nueva situación de frontera.
La Atalaya de Quintanilla, en Quintanilla de Tres Barrios, San Esteban de Gormaz (Soria), es una torre de vigilancia construida en sillarejo calizo trabado con mortero de cal, de planta circular y alzado cilíndrico, que conserva parte de su altura original algo más de 9 metros. Desde su privilegiada ubicación domina un amplio territorio, interrelacionándose funcional y visualmente con otros elementos del sistema de gran valor patrimonial como el Castillo de Gormaz, Alcubilla el Marqués, San Esteban de Gormaz, y las Atalayas de Navapalos, Enebral o Uxama.
El acuerdo de la Junta también busca delimitar la zona afectada por la declaración: El entorno de protección viene delimitado por un polígono que se inicia en el vértice 0 que coincide con la esquina noroeste de la parcela 7053 en su encuentro con la Cañada y se desarrolla en el sentido de las agujas del reloj.
En la delimitación del entorno de protección, se ha tenido en cuenta la condición de las atalayas como edificios destinados a la ocupación y estructuración del territorio, y en este sentido, su dominio sobre un amplio territorio y su intervisibilidad determinan el establecimiento de un entorno de protección amplio orientado a proteger las líneas visuales tanto desde la atalaya hacia el territorio circundante como en sentido inverso.
La ubicación de esta Atalaya, desde donde domina un amplio paisaje, que incluye el Castillo de Gormaz, Alcubilla del Marqués y San Esteban de Gormaz, además de contactar visualmente con las atalayas que controlan el curso del Duero, Navapalos, Enebral o Uxama, justifican la delimitación del entorno de protección.