De hecho los chavales del CEIP Virgen del Rivero y de la Escuela Hogar Alfonso VIII fueron los encargados de conducir en la mañana del Viernes de Carnaval este símbolo de las fiestas hasta la residencia de la tercera edad de la localidad, donde fueron recibidos por los más mayores que también portaban dibujos relativos al símbolo carnavalero. Los niños, que en el caso de los alumnos de 5º y 6º de Primaria, encargados de la confección de la sardina, portaban lunas como detalle del espacio, condujeron la sardina hasta el centro residencial y una vez allí, todos los escolares de la localidad de Primaria e Infantil, que vestían dibujos de estrellas, soles y lunas, cantaron a los más mayores, en una fiesta intergeneracional que ya se ha convertido en un símbolo.
De hecho es precisamente de la residencia de donde partió por la noche la Sardina rumbo a la Plaza Mayor, para ser presentada en sociedad ante los vecinos de la localidad, que llenaban el centro sanestebeño con sus disfraces, y escuchaban a los responsables del colegio y Escuela Hogar, encargados de pregonar estas fiestas invernales en esta edición.
Al ritmo de la Salmonete Band, la sardina junto a los disfrazados llegaron a la Plaza y también fueron los miembros de la charanga los encargados de amenizar el desfile de disfraces, que fueron cruzando el escenario, y de dar a conocer las primeras pistas del personaje X.