Más de 30 mujeres emprendedoras mostraron su talento en el centro cultural San Agustín de El Burgo de Osma, como iceberg del papel fundamental que las mujeres tienen en el medio rural a la hora de fijar población y generar empleo y recursos. El acto Mujeres en Danza que supuso la clausura de la Estrategia de Emprendimiento de la Mujer Rural en los ámbitos agrarios y agroalimentario de Castilla y León 2021-2023 que se ha desarrollado en el territorio de la asociación Tierras Sorianas del Cid.
El acto, que estuvo conducido por la periodista soriana Ángeles Cortina de Aquí la Tierra (TVE) permitió dar a conocer, a través de mesas redondas, ponencias, charlas y una feria de emprendedoras rurales, la labor que desarrollan estas mujeres empresarias en el territorio, a la vez que mostrar sus productos y servicios al resto de la comunidad.
Durante dos años, Tierras Sorianas del Cid ha llevado a cabo un trabajo con la mujer rural como protagonista, en este proyecto impulsado por la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural y que ha permitido consolidar el Punto de Apoyo al Emprendimiento y el Empleo de la Mujer Rural donde se han prestado varios servicios. Durante estos meses se ha acompañado a la mujer rural en el proceso de búsqueda de empleo y mejora profesional mediante formación de calidad, así como se las ha asesorado, capacitado y ofrecido otros recursos para que pudieran crear empresas sostenibles. Dentro de este punto de apoyo también se pretendía ser un espacio de contacto, información y asesoramiento para hacer crecer y digitalizar empresas creadas por mujeres rurales. Con el apoyo de Tierras del Cid se ha buscado la promoción de la mujer rural emprendedora mediante campañas para visibilizar su contribución al territorio.
Y el pasado fin de semana todo eso se ofreció en el centro cultural San Agustín bajo un prisma femenino, desde el medio rural a las altas esferas administrativas, para intentar romper el famoso techo de cristal. Así mujeres como la burgense Eloísa del Pino, presidenta del CSIC; Carolina Gutiérrez, subdirectora general de Dinamización del Medio Rural del MAPA; y Susana Mate, técnico de ICEX España, ofrecieron su experiencia inspiradora en una charla dirigida por otra mujer emprendedora, Sandra de Pablo, de COPE Uxama.
A lo largo de la mañana fueron muchas las mujeres que fueron pasando por los micrófonos del teatro burgense para contar cómo llegaron a sus puestos de trabajo, las trabajas que encontraron y los retos que tuvieron que superar, algunas ofreciendo experiencias innovadoras que desarrollaron hace décadas en favor de ofrecer todos los servicios en el medio rural, apostando por desarrollar modelos de negocio que no existían y demostrando la fuerza y tesón de las empresarias femeninas.
La charla permitió también observar cómo han cambiado los tiempos y las mujeres se han ido adaptando a nuevos retos a la largo de su historia, apostando por instalarse en el medio rural.
Tras la charla, el claustro del centro cultural burgense acogió la feria de productos y servicios ofrecidos por mujeres del territorio que estuvo animada con actividades complementarias como cata de vinos, degustaciones y demostraciones, un photocall dirigido por Blanca Almazán, responsable junto con Marta Roldán de la exposición Heroicas y que estuvo acompañada por Alba Hernández, así como la actuación del grupo Cafuné.
Al cierre de la jornada se presentaron los datos de balance de la Estrategia de Mujer Rural desarrolla en la comarca y con una entrega de diplomas y obsequios a las emprendedoras, entre ellas las mujeres que han integrado la primera promoción de pilotas de dron formadas por Tierras del Cid, clausurando el acto la delegada territorial de la Junta de Castilla y León en Soria.
Como señaló De Gregorio, “Castilla y León cuenta con un extenso espacio rural en el que las mujeres rurales son agentes clave para los cambios económicos, ambientales y sociales necesarios para el desarrollo de nuestros municipios”, reconociendo que trabajan “con proyectos innovadores, e incluyentes, que favorezcan la visibilidad de las mujeres, la superación de la brecha de género en el empleo y el emprendimiento, facilitando, a su vez, la conciliación de la vida personal, laboral y familiar”.
Esta danza relativa al trajinar, el hacer, el laborar y emprender, ha demostrado, como lo lleva haciendo a lo largo de la historia que las mujeres desarrollan, en el medio rural un papel fundamental para el desarrollo económico y la vertebración del territorio.