Crispación y preocupación en San Esteban de Gormaz, donde la Gerencia del Sacyl ha decidido que la ambulancia que presta el servicio vital básico en el centro de atención primaria de la localidad, se traslade de 9 de la mañana a 9 de la noche al hospital del Mirón de la capital, una situación que agrava todavía más la zona básica de salud que comprende no solo el municipio ribereño, sino una totalidad de 46 pueblos y cerca de 5.000 pacientes, que se han quedado sin ambulancia durante la mitad de la jornada.
Según explicó la alcaldesa de la localidad, María Luisa Aguilera, se trata de una decisión “contraria a todo buen criterio” y reconoció que, “entendemos que estamos en un tiempo inédito y hay que tomar decisiones precipitadas”, pero recordó que “nosotros tenemos dos inconvenientes que agravan más la situación”, explicó en referencia a la lejanía con la capital (70 kilómetros en el caso de San Esteban y casi 100 desde otros núcleos como Montejo de Tiermes, Langa de Duero, Castillejo de Robledo o Alcubilla de Avellaneda, a los que también se presta servicio, por ejemplo, y en segundo lugar a la existencia entre la población de otro tipo de enfermedades que también precisan del servicio de esa ambulancia como infartos, ictus o cáncer.
La regidora sanestebeña explicó que se han pedido explicaciones a la Junta sobre esta decisión que “no entendemos” y recordó que la zona de la Ribera necesita “que nos otorguen los recursos asistenciales que necesitamos en esta situación crítica” y recordó que si se demanda este transporte durante las 24 horas en el centro de salud es “porque permite un traslado en tiempo y forma adecuado”, algo que podría salvar vidas, al margen del COVID 19.
“No podemos generar más problemas a los que ya tenemos”, ha insistido Aguilera, quien reconoce que aunque existe en la localidad la ambulancia de Cruz Roja, “no obedece al criterio de soporte vital básico” y además, según ha podido saber HERALDO DIARIO DE SORIA, existe un contrato privado por el que se impide dar este servicio desde la ONG. Por eso la alcaldesa sanestebeña insiste en que “tener una ambulancia al lado del centro de salud es garantía de salud y vida” y recuerda que el centro de salud cubre una zona donde la población cumple con dos vectores: envejecida y dispersa, “un cóctel explosivo”, lamentó.